Comprendemos que la persona adicta es un enfermo emocional. Alguien que, en algún momento de su existencia por dolores, abusos y experiencias traumáticas, empezó a sentir un hondo y profundo vacío en su interior . Al no poder expresar esos sentimientos en palabras, la angustia lo llevó al consumo de sustancias diversas como una manera de anestesiar ese dolor y llenar ese vacío tan sentido.
El abordaje integral que llevamos adelante en
ADios Adicciones, procura la sanidad de esas heridas emocionales y el desarrollo espiritual para que el paciente encuentre un nuevo sentido a su vida.